Grupo Casa Remigio toma la delantera para regentar el café de Plaza de España
El último gran proyecto gastronómico de Madrid, más cerca de ver la luz. La subasta para remodelar y explotar el Café de Cervantes, la perla en plena Plaza de España que despierta el apetito de grandes grupos de la capital, entra en su recta final tras un duro proceso de puja.
Tras recibir en verano ofertas de hasta ocho operadores, el comité de expertos designado por el Ayuntamiento de Madrid para pilotar el concurso ha evaluado el apartado técnico de las mismas. Y según la documentación consultada por Sivarious, el que mejor propuesta ha presentado en el apartado cualitativo y económico es el Grupo Casa Remigio.
El grupo especializado en concesiones administrativas como los quioscos de Madrid Río o los chiringuitos del Puerto de Santa María, Tarifa y Zahara (en Cádiz), ha obtenido una puntuación total de 94,6 puntos sobre un total de 100. De confirmarse la adjudicación, supondría un golpe sobre la mesa para Juan Ramos, uno de los propietarios de Casa Remigio, y una oportunidad para desquitarse de su intento por reflotar el emblemático Mayte Commodore en lo más duro de la pandemia.
El grupo está especializado en concesiones administrativas
No obstante, lo cierto es que el proceso ha estado en un pañuelo, ya que el segundo clasificado es el grupo de restauración y catering Sandó con 86,12 puntos. Algo más lejos y con menos posibilidades de ser finalmente los adjudicatarios del contrato están Grupo Larrumba, que ha obtenido 85,45 puntos; Lamucca Holding (83,05 puntos), La Máquina (83,05 puntos) y Azotea Grupo (75,42 puntos). También se ha quedado sin opciones el Grupo Allard, que en los últimos ha realizado importantes inversiones de la mano de Martín Berasategui con el objetivo de hacerse notar en el sector.
Tal y como avanzó este medio, el periodo de adjudicación del Café de Plaza de España será por un periodo de 15 años. La puesta en marcha del establecimientos requerirá una inversión superior al millón de euros. Unos costes de reforma que podrían reducirse y que, ante la expectativa de un negocio con más de 200 metros de terraza y sin precios máximos fijados, despertaron una concurrida puja entre operadores de peso.
Nacida hace 23 años en una taberna de la calle Modesto Lafuente que da nombre al grupo, Casa Remigio se ha posicionado en los últimos años en abrir nuevas terrazas en entornos únicos permitiendo disfrutar de una buena oferta gastronómica en plena naturaleza. Su apuesta por Commodore pasaba por combinar cuatro ingredientes clave: una carta de restauración para todos los bolsillos, una sala de eventos, música y una oferta de copas.