Potaje de garbanzos y judías blancas

Potaje de garbanzos y judías blancas
1 estrella2 estrellas3 estrellas4 estrellas5 estrellas (27 votos)
Cargando...
  • Esta receta contiene Gluten
  • Esta receta contiene Pescado
Tiempo de Preparación
95 minutos
Número de Raciones
4 personas
Categoría de la receta

Ingredientes:

Os presentamos la receta de nuestro increíble potaje de garbanzos con judías blancas. Ya que tenemos las torrijas caseras, y el arroz con leche, ahora le toca el turno a otra tradicional receta para sorprender a tu familia esta Semana Santa.

Este plato se ha servido desde hace años todos los Viernes Santo en España, debido a la abstinencia de comer carne los viernes.

Hay mucha gente que piensa que este potaje de vigilia es muy complicado de hacer, pero se equivocan. Es cierto que es un pelín más elaborado, pero no tiene ningún tipo de complicación.

Para llevar a cabo este delicioso plato tendremos que previamente hacer un par de cosillas.

Pondremos en remojo desde la noche anterior tanto la judía blanca, como el garbanzo. Los colocaremos en recipientes diferentes. Los garbanzos son la única legumbre que se debe poner en remojo con agua caliente, o si preferís pasar de líos se pueden comprar los botes donde ya vienen cocidos. ¡Cuidado! Que el agua de los garbanzos esté caliente.

Cómo hacer potaje de garbanzos y judías:

  1. Cogemos una olla y le echamos un chorrito de aceite de oliva, la cebolla sin cortar, los dientes de ajo y las judías blancas. Le agregamos agua hasta cubrir por encima los ingredientes 2 o 3 tres dedos.
  2. En otra cacerola ponemos agua caliente, o bien calentamos agua, pero hasta que no esté caliente no le echamos los garbanzos. Dejamos que cuezan durante más o menos 20 minutos si se trata de una olla express, y si es una cacerola normal necesitaremos unos minutos más.
  3. Cuando estén ambos cocidos, vertemos los garbanzos en la olla donde están las judías blancas. En cuanto estén hervidas las judías blancas podemos retirar los dientes de ajo, o bien dejarlos, eso dependerá del gusto de cada uno.
  4. Lavamos el manojo de espinacas, y lo incorporamos a nuestro potaje. Lo dejamos hervir unos minutos.
  5. Mientras van cociendo todos los ingredientes, en una sartén tostamos con un chorrito de aceite las 3 rebanas de pan, junto a las 6 almendras.

    ¡Ojo, que no se quemen!

  6. Para este paso vamos a utilizar la batidora o minipimer. Vertemos la cebolla del potaje, el pan, las almendras tostadas, y por último le agregamos un par de cucharadas de pimiento choricero en el vaso de la batidora. Si hemos dejado los dientes de ajo los incluimos en la batidora. Machacamos con energía hasta que esté todo bien unificado.
  7. En cuanto tengamos la mezcla bien triturada, la incorporamos a nuestro potaje, y removemos. Esto le dará mucha más consistencia, y ligará nuestra sopa.
  8. En otra sartén, aparte, le echamos un par de cucharadas de aceite de oliva, y calentamos. Seguidamente, le agregamos una cucharadita de pimentón dulce, y removemos bien.
  9. A continuación, lo vertemos en nuestra sopa, y lo dejamos hervir durante 10 minutos a fuego lento.

potaje de garbanzos y judias Os propongo que en vez de salar el guiso le agreguéis un filete de bacalao, que es un pescado que antiguamente se salaba para su mejor conservación, ya que no existían los frigoríficos. Hoy en día se sigue haciendo. Si consideráis que es muy salado, podéis lavarlo un poco para así quitar el exceso de sal. De esta manera le damos a nuestro potaje de cuaresma un toque diferente.

A la hora de emplatarlo, os recomiendo que hagáis un huevo pasado por agua, o bien, duro. Colocadlo partido por la mitad sobre nuestra sopa. También le podéis poner una hojita de laurel. Eso ya depende de lo que prefiera cada uno.

Para hacer un huevo pasado por agua, solo tendremos que calentar en una cacerola pequeña un huevo, o la cantidad que desee cada comensal. Cubrirlos de agua y calentarlos hasta que el agua hierva, dejar pasar uno o dos minutos, y retirar del fuego. Enfriarlo un poco para facilitar quitarle la cáscara para cortarlo.

Si sois amantes de los platos de cuchara, no podéis perderos esta receta de judías pintas con arroz.

¿Qué es el pimiento choricero?

Es un tipo de pimiento rojo muy popular en la cocina española. Se seca para su mejor conservación. Podemos comprarlos ya hidratados en botes, o bien rehidratarlos en casa durante más o menos una hora. Se suele utilizar tan solo la carne del pimiento choricero. No es recomendable sustituir este pimiento por la ñora, ya que tienen diferente sabor. A pesar, de ser otro tipo de pimiento.

Veis, ¿Ha sido complicado hacer este plato? ¿Y cómo os ha quedado? ¿A qué os habéis sorprendido a vosotros mismos? Ya no tenéis excusa para hacer este riquísimo potaje de garbanzos en todo momento, y no solo dejarlo para los viernes de cuaresma.

Información nutricional

Buscador de recetas

Recetas Relacionadas