Levaduramadre se ha convertido en el mascarón de proa de Comess Group. Desde que en julio de 2021 se hiciera con una participación mayoritaria de la cadena de panaderías artesanales, el grupo de restauración ha puesto toda una red de contactos y recursos en apoyar su expansión.

El resultado de esta apuesta es que Levaduramadre ha más que duplicado su tamaño en apenas dos años, pasando de los 60 establecimientos a superar los 130. Una evolución que ha superado las expectativa iniciales y que acerca el objetivo de llegar a los 180 locales en el medio plazo.

Así, ante las facilidades que está encontrando Levaduramadre para abrir mercado, sus responsables no han dudado en revisar sus objetivos de crecimiento y fijarse un ritmo de 40 aperturas anuales.

Desde la compañía aseguran que su intención es seguir con la expansión de la marca en la zona de Levante, con foco en Cataluña, donde prevé llegar a cerrar el año con 18 establecimientos. En cuanto a su apuesta por Valencia y Alicante, para los próximos meses proyectan abrir más de ocho tiendas nuevas.

Para el último trimestre del año está prevista su entrada en el País Vasco con una primera tienda en Bilbao. Es una comunidad autónoma que resulta clave en los planes de crecimiento de la compañía, que prevé desarrollar a través de una red de franquiciados.

A nivel económico, Levaduramadre aspira a alcanzar un Ebitda propio de 6,5 millones en 2023, en comparación con los 5 millones cdel año pasado. En este sentido, también espera elevar los ingresos de su red, que alcanzaron los 29,8 millones en 2022, lo que supuso un incremento del 39% respecto al año anterior. La mitad de sus ventas corresponden a panadería.