Pudin de chía con horchata y fresas

Pudin de chía con horchata y fresas
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En esta receta se habla de:

Tiempo de Preparación
10 minutos
Número de Raciones
4 personas
Categoría de la receta

Ingredientes:

El verano se acerca y nuestros cuerpos lo saben. Por eso, y porque siempre es un buen momento para comerse algo dulce (y más aún si es 100% saludable) este pudin de chía con horchata, fresas y nectarina ¡os va a encantar! El pudin de chía es un postre/merienda/desayuno muy fácil de hacer. Podemos tardar menos de 5 minutos en hacerlo, aunque necesita unas 4 horas de reposo en la nevera para poderse comer.  Este es el tiempo aproximado que tardan los mucílagos, que suponen un gran aporte de fibra, en hincharse y crear esa textura gelatinosa. A muchas personas esto les resulta chocante e incluso desagradable. Si es tu caso, puedes probar a moler las semillas antes de hacer el pudin, lo que disimulará su textura original. Es importante que aprendamos a educar el paladar, ya que el consumo excesivo de alimentos procesados, sales, fritos, azúcares y harinas refinadas… atrofia nuestras papilas y nuestra capacidad de disfrutar de los alimentos en su estado natural. Si sois veganos o intolerantes a la lactosa os recomiendo leer los ingredientes de la horchata, ya que muchas veces añaden leche. La horchata artesana NO se elabora con leche. Es en realidad como cualquier otra leche vegetal: chufa y agua. ¡Podéis hacerla vosotros mismos si os animáis! De este modo además os aseguráis de que no lleva nada de azúcar.

Por qué incluir semillas de chía en nuestra alimentación

Las semillas de chía ya servían de alimento a los aztecas, mayas e incas, por la energía que aportan. Junto con el lino, es uno de los alimentos vegetales con más concentración de ácidos grasos omega 3, además del omega 6. Sus niveles de calcio superan a los de la leche de vaca. Contiene además fósforo, potasio, magnesio, y vitaminas A, E, C y del grupo B (sobre todo vitamina B3). Su elevada cantidad de fibra hace que sea un alimento muy saciante, que ayuda a mantener un tránsito intestinal regular y los niveles de azúcar en sangre. Por este mismo motivo, no es recomendable consumir grandes cantidades: el exceso de fibra reduce la absorción de nutrientes.

Cómo hacer el pudin de chía con horchata

En esta receta hemos añadido fruta para que fuera más vistoso y servirá para que la acidez de la fresa contraste con la horchata. No obstante, ¡podéis cambiar lo que os apetezca! La horchata por leche de arroz o de almendras, plátano en lugar de estas frutas… O quitar la fruta y servir con esta granola casera con chocolate y avellanas, o hasta galletas para los más golosos.
  1. En un cuenco o recipiente con tapa mezclamos con varillas: la horchata, el sirope de agave, la chía, la canela y la vainilla. Si la horchata es muy dulce podéis omitir el agave.
  2. Dejamos reposar en la nevera un mínimo de 4 horas. Lo ideal es hacerlo de un día para otro.
  3. Lavamos las fresas y las trituramos con unas gotitas de limón.
  4. Lavamos las nectarinas y las trituramos también con limón. Podemos añadir agave a las frutas si nos resultan demasiado ácidas, así como una pizca de canela o jengibre en polvo.
  5. Para servir, llenar los vasos con capas intercaladas de pudin, puré de fresa y puré de nectarina. Podéis poner por encima trocitos de estas frutas, frutos secos o frutas deshidratadas.
El número de raciones puede oscilar entre 3-4 dependiendo de si usáis esta receta como postre o como desayuno o merienda. Como postre serían 4. Como desayuno o merienda podrían ser 3. Dura unos tres días en la nevera, ¡aunque probablemente os lo comeréis antes!

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