El sector de espirituosos fía su recuperación completa a la evolución de la hostelería

Para la Federación Española de Espirituosos, el 2021 fue un ejercicio aguado. Aunque el consumo de bebidas destiladas repuntó hasta los 165 millones de litros, un 9,9% respecto al 2020, todavía no se ha recuperado de la fuerte caída que sufrió como consecuencia de la pandemia. Durante este primer año las ventas del sector cayeron entre un 30% y un 50%, llegando al 80% en algunos casos singulares.

De este modo, las cifras del año pasado se sitúan un 20% por debajo de los niveles registrados en 2019. «Aunque en 2021 las ventas de bebidas espirituosas han registrado una progresiva recuperación, los últimos doce meses han demostrado que aún queda mucho para recuperar las cifras prepandemia», indican desde la patronal.

Las exportaciones de bebidas espirituosas en España crecieron un 33% en 2021, alcanzando un valor de 838 millones de euros

Esta situación viene derivada de la fuerte vinculación con el sector hostelero, donde se registran 7 de cada 10 consumiciones, y la lenta recuperación de la afluencia de turistas a España. A ojos de Espirituosos de España, son dos de los condicionantes para conseguir un mayor grado de crecimiento en los niveles de consumo. Una relación que queda demostrada en el hecho de que las ventas en el canal hostelero aumentaran un 12,9% pese a las restricciones, mientras que las de alimentación lo hicieron un 7,6%.

En relación al gasto per cápita en bebidas espirituosos, se situó en 52 euros fuera del hogar, por los 9 euros en gasto doméstico que se hace de estos productos. En cifras absolutas, el sector contribuyó con más de 1.350 millones de euros a las arcas del Estado. Además, por cada euro de valor añadido bruto generado por el sector, se generan otros 4 euros de valor añadido a la economía.

La mayor parte del empleo generado por la actividad está íntimamente relacionada con el gasto producido en los sectores de la restauración, la hostelería y el turismo. Así, al sector pueden atribuírsele más de 5.000 empleos directos, que contribuyen de forma importante a fijar población en la España rural. Pero su contribución indirecta es aún mucho mayor, ya que por cada empleo directo se generan 9 empleos indirectos o inducidos en sectores afines, como la hostelería, el turismo, o la agricultura.

El Comercio Exterior supera los niveles prepandemia

En lo que a comercio exterior se refiere, podemos señalar que las exportaciones de bebidas espirituosas en España crecieron un 33% en 2021, alcanzando un valor de 838 millones de euros, situándose por encima de los valores existentes en 2019, recuperando así los índices prepandemia. De este modo, el sector ratifica su internacionalización, convirtiendo la calidad de las bebidas producidas en España como un importante referente a nivel mundial.

Con estas cifras, las expectativas para 2022 muestran una evolución positiva, la cual debería consolidarse a lo largo del segundo semestre de este año. Ello a pesar de la tendencia inflacionista, y de los problemas que registra el mercado de materias primas y de transporte. No obstante, las condiciones económicas han de mantenerse estables para que el sector pueda crecer. «

Tras tres ejercicios de contención, las empresas necesitan ver crecer sus cuentas de resultados para volver a invertir, por lo que, “es necesario mantener las condiciones fiscales, sin alterar la carga impositiva ya de por sí elevada, que soportan las empresas del sector”, ha señalado Bosco Torremocha, director de Espirituosos España. “Estamos en un momento crucial, que requiere medidas excepcionales. Saber asumirlas en estos momentos será la clave para conseguir la pronta recuperación de todos los sectores afectados por esta crisis sin precedentes en nuestro país”.

El perte agroalimentario, con 1.800 millones de dotación económica, tiene que llegar verdaderamente a los sectores y empresas más afectados. “Sin duda esta será una oportunidad para muchas empresas del sector”, ha señalado Bosco Torremocha.

De cumplirse estas expectativas, no sería hasta 2023 cuando se volvieran a alcanzar niveles de ventas similares a los de 2019, para lo que es necesario que se consoliden las buenas expectativas que presenta 2022.

Aún así, el sector sigue comprometido con el desarrollo de sus iniciativas en materia de responsabilidad social, mediante las que promueve el consumo responsable de bebidas alcohólicas, y en las que ha invertido más de 28 millones de euros. Así como en la continuidad de su Estrategia de Sostenibilidad.