La licitación de los comedores escolares de Castilla y León se enquista con el curso en marcha
Cuatro meses después de abrirse la convocatoria y con el curso escolar ya en marcha, Castilla y León no ha renovado los contratos de concesión de los comedores escolares en los centros docentes públicos de la comunidad. El Consejo de Gobierno de la Junta aprobó en mayo nueve acuerdos para la celebración de un concurso que ascendía a 174 millones de euros y con plazo de ejecución desde este mismo curso, pero actualmente Valladolid es la única provincia que cuenta con una propuesta de adjudicación.
Esta dilación en el procedimiento ha hecho saltar las alarmas por el hecho de haber arrancado el calendario escolar sin una empresa de colectividades definitiva, tanto a la hora de planificar el servicio como los problemas que plantea cambiar de licitador en pleno curso.
Tanto es así que desde el sindicato UGT han presentado un escrito ante el Procurador del Común para denunciar «falta de transparencia e irregularidades» en los contratos. Denuncian que no ha sido hasta los meses de junio y julio cuando las distintas provinciales de educación han licitado las concesiones de servicio mediante procedimiento “restringido y tramitación urgente”.
Esta situación ha propiciado el que los comedores escolares abrieran el pasado día 9 con las empresas concesionarias del curso pasado, sin que la administración haya explicado aún, según reclaman desde la secretaría provincial del sector, en calidad de qué, hasta cuando y qué tipo de contrato/acuerdo temporal se ha firmado”.
El pasado día 9 abrieron los comedores de la comunidad sin que la administración haya renovado la concesión del servicio
El contrato más cuantioso corresponde a Valladolid, que sacó a concurso la gestión de sus comedores escolares por un valor de 45,6 millones de euros. Lo ha hecho en dos lotes para los que ha propuesto a IGMO y Serunion, dos empresas de referencia en el sector que se han impuesto a otros competidores directos como Aramark o la UTE formada por Mediterránea de Catering y Servicios de Comidas y actividades sociales.
El resto de licitaciones se encuentran en fase de estudio tras la recepción de ofertas. A todos ellos han concurrido las cuatro empresas mencionadas, que aspiran a hacerse con la gestión de estos servicios hasta el último día lectivo del curso 2024-2025, con la posibilidad de prórroga por dos cursos escolares más.
El contrato de concesión del servicio público de comedor escolar en la provincia de Ávila cuenta con un valor estimado de 18,2 millones de euros; el de Burgos 24,1 millones, el de León 33,4 millones, el de Palencia de 9,6 millones, Salamanca 12,6 millones, Segovia 13 millones, Soria 9,2 millones y Zamora 8,8 millones. Este último es el único que no se ha dividido en lotes.
La determinación del valor estimado se ha realizado teniendo en cuenta, entre otras variables, el número de alumnos que se benefician de bonificaciones en el precio del menú, que pueden ser del 50 %, del 75 % y del 100 %.
Para la Junta de Castilla y León, el comedor escolar es un importante instrumento de conciliación de la vida familiar, laboral y escolar. Considera a su vez que este servicio permite compensar las posibles carencias socioeconómicas gracias al sistema de ayudas para centros docentes públicos implantado por la Consejería de Educación. Actualmente 43.000 escolares hacen uso diario de este servicio en los 521 comedores escolares de los centros docentes públicos que existen en la región.
