Falta de liquidez, deudas acumuladas y caída de la actividad… Son los ingredientes de la infusión causante de los problemas económicos que atraviesa Compañía del Trópico. Especialmente a raíz del estallido de la crisis sanitaria, que sigue haciendo mella en la cadena de restauración propietaria de Café&Té y Panaria, la cual ha vuelto ser puesta en venta recientemente por el fondo Kartesia.

Como en el caso de la mayoría de empresas, la pandemia ha implicado un impacto significativo en la consecución de los objetivos de Compañía del Trópico. Cerró el ejercicio 2021 con unos ingresos 18,9 millones de euros, cifra muy por debajo de los 81 millones declarados en 2019. En este mismo periodo ha pasado de generar un beneficio operativo de 10 millones a perder 9,7 millones el año pasado.

Teniendo en cuenta los números rojos de 8,3 millones de euros en 2020, la compañía acumula un agujero de ejercicios anteriores que se eleva a 36,7 millones. Según se admite en las últimas cuentas remitidas al Registro Mercantil, sus responsables han implementado un plan de acción que incluye una serie de medidas encaminadas a minimizar el impacto y proteger la continuidad de la sociedad.

La compañía perdió 9,7 millones de euros el año pasado

Entre ellas, destacan la presentación de varios Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) por causas económicas, técnicas, organizativas o de producción. El último estuvo vigente desde el pasado abril hasta el 31 de agosto. Asimismo, ha renegociado con los propietarios de los locales donde opera el pago e importe de los alquileres, que alcanzaron los 5,4 millones en 2021.

Junto a esta última medida, motivada por la inactividad de ciertos locales comerciales, se han mantenido conversaciones con diversos proveedores para obtener diferimientos en el venimiento de sus deudas hasta la apertura de los mismos. En paralelo a estas negociaciones, se ha buscado nueva financiacion para mayor holgura de la tesorería en el corto plazo, y así como una carencia adicional en el repago de los préstamos, que al cierre del pasado ejercicio ascendían a 6,4 millones.

En relación con los problemas de liquidez, Kartesia, el principal accionista de la cadena, ha reforzado su posición financiera con operaciones de préstamo e incluyendo al Banco Santander y BBVA en el pool bancario de acreedores. La posición con Kartesia ascendía a 3,1 millones de euros en 2021.

La compañía de restauración cerró algunos de sus locales durante el año pasado. Dejaron de operar cinco locales propios, contabilziando un total de 166 locales al cierre de 2021, frente a los 193 de 2020.

En medio de esta situación, Kartesia ha vuelto a poner en el mercado la compañía, tal y como avanzó El Economista. Anteriormente la matriz de Panaria ha estado en venta hasta en dos ocasiones, la última con un precio de entre 80 y 100 millones de euros.