El negocio de Ibersol todavía busca recuperarse tres años después del cerrojazo del covid y en plena redefinición de su perímetro de actuación, incluido su adiós a Burger King en España y Portugal. El grupo de restauración portugués alcanzó los 89,5 millones de euros en el primer trimestre, según la información remitida a la autoridad bursátil portuguesa (conocida por sus siglas CMVM). Esta cifra representa un descenso del 15,8% respecto a los 106,4 millones facturados en el mismo periodo del 2022, y se encuentra un 10% por debajo de los niveles de 2019.

Por mercados, las ventas en Portugal llegaron a los 53,5 millones de euros entre enero y marzo, frente a 69,7 millones del año pasado. En España el volumen de negocio se situó en los 32,7 millones. Esto es, apenas un 3,2% menos que al cierre del primer trimestre de 2022, cuando la dueña de Ribs y Pans & Company rozó los 34 millones. Sin embargo, todavía está lejos de los 40 millones obtenidos en 2019 y los 38 millones de 2020, ya en plena pandemia.

Este descenso en la actividad de Ibersol se explica por la pérdida de las ventas que aportaban los 158 locales de Burger King operados por la compañía hasta agosto del año pasado, momento en el que su propiedad pasó a Restaurant Brands Iberia (RBI). Tras desembolsar 260 millones de euros, este último se hizo con 121 establecimientos de la enseña en Portugal y 37 en España, incrementando así su cifra de locales propios de Burger King hasta los 594 actuales.

Ibersol estima en 9,3 millones las ventas que ha dejado de ingresar por Burger King

Por parte de Ibersol, que cifra en 9,3 millones de euros el negocio perdido, ha reducido su portafolio desde los 618 hasta los 485 locales en el último año como consecuencia de esta operación. Al cierre de marzo, controlaba 297 locales en Portugal, 176 en España y 10 en Angola.

Como es lógico, proporcionalmente la venta de Burger King ha tenido un impacto menor en el negocio español, que se ha mantenido prácticamente plano en comparación con el luso. Además, el grupo ha abierto mercado en nuestro pais a través de su división de restauración en carretera, gracias a la reciente adjudicación de diez puntos de venta en el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas y ocho en el de Lanzarote.

A este respecto, la matriz de EatOut hace referencia en su informe de cuentas a la recuperación de los niveles de tráfico de pasajeros previos a la crisis sanitaria, acompañados de un aumento de las rentas en los aeropuertos que no considera especialmente relevantes en la partida de costes.

La compañía espera dar un fuerte impulso a su actividad gracias al acuerdo con Pret A Manger para su expansión en la Península Ibérica. Las primeras aperturas están previstas en Barajas, si bien la alianza contempla la apertura de 70 restaurantes de la marca durante la próxima década.