La fiebre burger no toca techo y copa casi dos de cada tres euros en comida rápida
La fiebre de los españoles por la burger no parece tener límites. Inmersa en un consumo monstruoso, España vive desde hace años una burguerización imparable. Ya sea por la proliferación de locales como de conceptos dirigidos a todo tipo de público, este producto se ha convertido en el rey de la restauración nacional al copar casi un tercio del mercado de la comida rápida.
Según el Observatorio Sectorial DBK de INFORMA (filial de Cesce), líder en el suministro de Información Comercial, Financiera, Sectorial y de Marketing en España y Portugal, el valor del mercado de comida rápida se situó en 5.330 millones de euros en 2023, lo que representó un crecimiento del 10,9% respecto a 2022, tras los aumentos registrados del 27% en 2021 y del 22% en 2022.
Por tipo de establecimiento, las hamburgueserías mantuvieron un comportamiento muy dinámico al aumentar un 12,4% su facturación, hasta los 3.175 millones de euros. Expresado de otra forma, la burger acapara casi dos de cada tres euros de gasto en comida rápida, afianzando la tendencia exponencial de un sector que ha crecido más de un 40% desde la pandemia. De hecho, la demanda de hamburguesas a domicilio se ha más que triplicado en estos años, superando con creces los 6 millones de pedidos anuales.
Actualmente existen cerca de 50 enseñas de burger que operan más de 2.950 locales a nivel nacional y emplean a 40.000 trabajadores. Entre McDonald´s (600) y Burger King (950) se reparten algo más de la mitad del mercado, seguidas de Goiko y TGB con más de un centenar de locales. A partir de ahí se despliega una relación de enseñas con una presencia física y un posicionamiento de marca muy afianzado, como son Carl´s Jr, Five Guys o Vicio.
A la pregunta de si hay mercado para tanta burger, Kantar Worldpanel conidera que todavía hay margen de crecimiento, teniendo en cuenta que el número de españoles que ha comido una hamburguesa en el último año alcanza el 48% de la población.
Las pizzerías, con unos ingresos de 840 millones, y las bocadillerías, con 545 millones, contabilizaron tasas de crecimiento más moderadas, situadas en el 7% y 4,8%, respectivamente. Por su parte, el grupo de otros establecimientos incrementó su facturación un 14,1%, cifrándose en 770 millones de euros.
La prolongación del crecimiento de los pedidos para llevar y entregar a domicilio, la superación de los niveles de consumo en sala previos a la pandemia y el incremento de los precios permitieron que la facturación mantuviera una evolución muy positiva.
Las ventas en mostrador generaron 3.930 millones de euros, lo que supuso un 11,6% más que en 2022. Por su parte, el servicio delivery moderó su crecimiento en 2023 respecto a los ejercicios precedentes, incrementándose un 8,9%, hasta los 1.400 millones de euros (el 26% del negocio total).
Tras varios ejercicios con crecimientos del mercado superiores al 10%, es previsible que en los próximos años se registre una tendencia de desaceleración, en un contexto de debilidad del consumo privado y contención de los precios. Según Edurne Uranga, directora de Foodservice Europa en Circana, este escenario responde a una nueva normalidad marcado por «un número de visitas que se adapta a nuestro estilo de vida».
Respecto a la oferta de establecimientos, a lo largo de 2023 continuó aumentando, hasta alcanzar los 5.820 locales al cierre del año, registrándose la apertura de puntos de venta por parte de cadenas ya operativas y la creación de nuevas enseñas.
El sector presenta un alto grado de concentración en torno a un número reducido de grandes cadenas, las cuales cuentan con un amplio número de locales repartidos por toda la geografía española. De esta forma, las cinco primeras cadenas en función del número de locales reunieron en 2023 algo más del 50% de la oferta total de establecimientos, mientras que en términos de facturación las cinco primeras cadenas reunieron el 74,5% del mercado total.