Áreas afianza su emporio en Barajas gracias al concurso de restauración de Aena

Áreas afianza su emporio en Barajas gracias al concurso de restauración de Aena

miércoles 01 de febrero del 2023 | 02:18

El riesgo de perder terreno estaba ahí, pero Áreas ha defendido su parcela de negocio en el Aeropuerto Madrid- Barajas. La multinacional española gestionará 32 de los 55 locales de restauración que Aena había sacado a subasta en su mega concurso para la renovación de la oferta gastronómica del aeródromo madrileño.

De acuerdo con la información avanzada por El Confidencial, Áreas ha logrado hacer valer su oferta en dos tercios de los espacios comerciales ofertados por el gestor aeroportuario. Esta treintena de establecimientos le reportarán una facturación estimada de unos 100 millones de euros anuales.

Áreas era la única empresa que había presentado ofertas para todos los concursos con el objetivo de mantener su omnipresencia en el aeropuerto de Barajas, mientras que otras como Select Service Partner (SSP) se postularon para 17 lotes, para un total de 47 puntos de venta. Esta última, con una presencia de siete unidades en El Prat de Barcelona, diez en Las Palmas de Gran Canaria y al frente del grueso de negocios F&B en el aeropuerto de Málaga, concurría con la intención de incrementar su peso en Madrid.

Competidores como SSP o EatOut pujaban por ganar peso en el aeropuerto

Otra de las compañías que optaba a pisar fuerte en Barajas es EatOut, filial del grupo Ibersol, con ofertas en doce lotes (un total de 40 locales). A través de marca como Pans & Company, Ribs o FresCo, gestiona sesenta puntos de venta propios en diez aeropuertos nacionales. También aspiraban a hacerse con la mitad de la oferta de Madrid Cafestore y Lagardère, en una clara apuesta por crecer en la restauración en ruta.

Hace unos meses la Asociación Española de Operadores Comerciales de Aeropuertos, Puertos y Estaciones (Aeocape) interpuso un recurso contencioso-administrativo contra los pliegos del concurso al considerar que eran contrarios a derecho. Denunciaban la inclusión de la subasta electrónica y una serie de normas de incompatibilidad entre expedientes que pueden llevar a que la mejor oferta económica no gane el concurso

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