Aramark inyecta 30 millones en su filial española para compensar las pérdidas derivadas del covid
Los últimos años no han sido los mejores para las empresas de restauración colectiva, pero en algunos casos las goteras provocadas por la pandemia amenazan con convertirse en inundación. Entre ellas Aramark, una de las referencias del sector en España, que ha acusado especialmente el cierre de comedores escolares, restaurantes de empresa, cafeterías de hospitales y la cancelación de actividades de ocio y eventos.
Sin ir más lejos, la compañía admite en las últimas cuentas presentadas recientemente al Registro Mercantil, correspondientes al 2021, que su matriz estadounidense ha tenido que inyectarle 30 millones de euros en los dos últimos años para equilibrar su estructura patrimonial. Aportaciones que se producen después de pérdidas significativas que llevaron a Aramark España a presentar un fondo de maniobra negativo por 4,5 millones de euros al cierre del último ejercicio, finalizado el pasado 30 de septiembre.
Entre 2020 y 2021 se dejó 35,8 millones de euros, de los cuales 10 millones en el último año. Un agujero económico provocado por la evolución de su negocio, que antes de la pandemia se situaba en los 243 millones de euros y finalizó 2021 en 121,6 millones. Aramark reconoce que la crisis del coronavirus ha afectado a centros en sectores clave para la sociedad tales como espectáculos deportivos, conciertos multitudinarios, etc.
Se dejó 35,8 millones entre 2020 y 2021 debido a la caída del negocio
Junto al dinero recibido, el grupo al que pertenece ha manifestado de forma expresa su apoyo financiero y operativo para que la sociedad continúe sus operaciones y afronte sus obligaciones financieras al menos, durante los próximos 18 meses. Y es que, partiendo de la gran incertidumbre que se dibuja en el escenario actual, los administradores siguen evaluando y supervisando la continua implementación de medidas adicionales para adaptar las operaciones conforme evolucione la pandemia.
Entre las medidas destaca la aplicación de un Expediente de Regulación de Empleo (ERTE) que afectó a 5.139 empleados al principio de la crisis sanitaria, si bien hasta el pasado abril seguían afectados 370 trabajadores por aquellas actividades que no se habían restablecido en su totalidad.
Pese a este contexto, la compañía de restauración espera volver a niveles de actividad similares a los anteriores a la declaración de la pandemia gracias a que el mercado de prestación de catering vuelve a reactivarse con el aumento de demanda privada. La consecución de este objetivo pasa por explorar vías como la restauración ordinaria, tal y como demuestra la apertura desde el pasado noviembre de dos restaurantes.
Asimismo, en los últimos meses ha reforzado su presencia en el mercado del deporte al hacerse con el servicio de catering del Mutua Madrid Open, incluyendo la zona VIP. Otras de las iniciativas llevadas a cabo recientemente es su alianza con Martín Berasategui para impulsar un nuevo concepto de restauración premium en eventos deportivos, donde destaca la presencia de Aramark en una decena de estadios de La Liga, el Circuit de Barcelona, el Circuito de Jerez, el Palau Sant Jordi.
