
Las 5 tendencias que darán forma a los viajes y las estancias en hoteles este 2025
La digitalización y automatización, la huida de talento, la innovación en Food and Beverage, la distribución multicanal y la multimodalidad de alojamientos, fueron algunas de las tendencias que realmente dejaron huella en la industria hotelera el pasado año. Desde dentro, la Alianza Hotelera adelanta las cinco tendencias que dominarán la industria hotelera este año, tanto en la transformación de la experiencia para personalizarla en el mayor grado posible, como en innovaciones en inteligencia artificial.
En este contexto, Fernando Gallardo, secretario de la Alianza, ha avanzado las tendencias que marcarán 2025. Para él, las tendencias no son simples acertijos ni predicciones vagas sobre un porvenir incierto, sino «vectores de evolución» basados en patrones sociales, económicos, culturales y tecnológicos. En esta misma línea, ha identificado cinco tendencias que, según su análisis, tendrán un impacto significativo en la industria hotelera durante este año.
Se trata de factores que no solo representan desafíos, sino también grandes oportunidades para conectar con los viajeros y adaptarse a sus demandas.
Las tendencias que marcarán el 2025 según Gallardo
Es indiscutible que a lo largo de los últimos años la importancia que se le otorga a la experiencia hotelera ha ido evolucionando hasta situarse prácticamente en el centro. En este contexto hay un término que suena con mayor fuerza: la hiperpersonalización. ¿Qué entiende el sector al hablar de una experiencia hiperpersonalizadad? Principalmente, que el huésped está en el centro.
Hoy en día, los viajeros están más conectados e informados que nunca, lo que ha elevado sus expectativas respecto a los servicios personalizados. Para responder a estas demandas, “los hoteles deben adaptarse e implementar tecnologías que les permitan conocer mejor a sus huéspedes y anticiparse a sus preferencias incluso antes de su llegada”, según Gallardo.
Es importante subrayar que, entre estas innovaciones, destacan los check-ins móviles, como los ya estandarizados en la industria del transporte aéreo, sistemas inteligentes capaces de recordar y ajustar las preferencias de los clientes tanto en sus habitaciones como en las zonas comunes, propuestas experienciales personalizadas y la automatización de procesos diseñados para generar el factor wow sin asociarse necesariamente a un lujo.
En este nuevo escenario, la personalización se convierte en una herramienta clave para fidelizar a los viajeros.
La segunda de las tendencias va de la mano de la parte más emocial del turista. De hecho, hace referencia directa al paso de la experiencia a la pasión. Para Fernando Gallardo, las redes sociales están transformando el «momento experiencial» en un «momento pasional», marcado por preferencias de nicho como el turismo culinario, enológico, los retiros de bienestar, las aventuras aparentes o simplemente pasear por ciudades atractivas.
No se trata de segmentar en nichos específicos, sino de diseñar propuestas que conecten con las diversas modalidades de viaje. El viajero es multimodal: hoy viaja solo, mañana en familia; hoy busca gastronomía local y mañana un destino exótico, pero sigue siendo el mismo cliente con expectativas cambiantes.
El papel de la inteligencia artificial en 2025
A pesar de que se pensó que el turismo internacional creció como respuesta a la pandemia (revenge travel), Gallardo asegura que parece más bien que la aceleración tecnológica está facilitando el acceso a destinos bajo todas las modalidades de viaje. Esto impulsa el crecimiento turístico, especialmente desde regiones emergentes como Asia, que aportarán un tsunami de nuevos turistas. España deberá prepararse no solo para recibir 100 millones de turistas, sino hasta 150 millones en un futuro cercano. La pasión por viajar seguirá creciendo, superando limitaciones racionales o regulatorias.
En 2024, la inteligencia artificial irrumpió con fuerza en la industria del turismo. Desde entonces, está revolucionando la gestión hotelera, introduciendo posiciones laborales inéditas y herramientas que potencian la personalización y eficiencia. Aunque la Singularidad (una inteligencia superior a la humana) se espera hacia 2040, la IA generativa ya está transformando el sector.
A día de hoy, existen herramientas como chatGPT, Google Gemini o Microsoft Copilot que ya permiten diseñar experiencias hiperpersonalizadas y estrategias de marketing audaces, mientras que chatbots gestionan consultas y reservas a todas horas. Además, los sistemas automatizados de check-in y check-out agilizan procesos.
Los Sistemas de Gestión de Ingresos (RMS) con IA optimizan precios en tiempo real y pronostican tendencias de ocupación.
Según el análisis de Gallardo, estas tecnologías no solo mejoran la operatividad, sino que liberan al personal para interactuar de manera más significativa con los huéspedes, elevando la experiencia general. La IA se consolida como clave para incrementar la rentabilidad y la satisfacción en la industria hotelera.
La implementación de inteligencia artificial en los RMS (Sistemas de Gestión de Ingresos) está transformando la estrategia hotelera, priorizando tarifas más rentables sobre precios bajos. Este enfoque, liderado por programas como los desarrollados por BEONx y la Alianza Hotelera, ha duplicado los ingresos provenientes de canales directos frente a las OTAs, gracias a herramientas avanzadas de optimización y precios dinámicos.
El bienestar y la experiencia marcan las tendencias de 2025
Mientras, las webs hoteleras han evolucionado de simples vitrinas a motores de reservas con interfaces mejoradas, incrementando la confianza de los viajeros y fomentando programas de fidelización más ambiciosos. Sin embargo, las OTAs, especialmente Booking.com, mantienen un papel crucial, consolidándose en 2024 como la empresa de mayor capitalización mundial. A pesar de la competencia, las regulaciones y las tensiones con hoteleros, su nueva herramienta basada en IA será clave para muchos operadores en 2025, según Gallardo.
Es evidente que siguiendo con el relevante papel que ha ocupado a lo largo de los últimos años, el bienestar sigue siendo prioridad en 2025. Más allá de la sostenibilidad, el bienestar se ha convertido en una prioridad para los viajeros, y los hoteles están ampliando su oferta más allá de los spas tradicionales.
En este sentido, cabe destacar que esto incluye menús saludables y personalizados con ingredientes locales, instalaciones que promueven el descanso, terapias de relajación, mindfulness y actividades como senderismo o yoga al amanecer. La salud mental se perfila como una experiencia de viaje, inspirada en referentes asiáticos como Amanresorts o Six Senses.