Tartar de salmón

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Ingredientes:

Ahora, al igual que en verano, ya apetecen platos frescos, ligeros, refrescantes, pero a su vez sabrosos y sencillos de preparar. Por ello, hoy hemos optado por desvelaros nuestra receta de tartar de salmón.

Si con el calor os cuesta más poneros a cocinar y no os apetece casi ni entrar en la cocina, probad estas recetas perfectas para el verano: salmorejo cordobés, ensalada de quinoa con aguacate y rúcula, ajoblanco malagueño, salpicón de marisco, vichyssoise casera…

Debemos tener en cuenta que para realizar este plato es necesario congelar, un mínimo de 24h, el trozo de salmón que vayamos a emplear. A no ser que seáis previsores y ya tengáis algún trozo en el congelador que podáis descongelar para dicha receta de verano. Hacer esto es imprescindible, ya que si tiene anisakis de esta forma evitaremos ningún problema digestivo o peor.

Cómo hacer tartar de salmón casero:

1. Una vez tengamos la pieza de salmón libre de anisakis, y medio descongelada pasaremos a córtalo en dados no muy grande, ni muy pequeños.
2. Una vez cortado el salmón lo pasamos a un bol para ir macerándolo con los siguientes ingredientes: dos o tres cucharadas de salsa de soja, el zumo de medio limón, ½ cucharadita de wasabi, el aceite de sésamo y la mostaza Dijon. Mezclamos hasta que esté todo el salmón bien impregnado. Cubrimos el cuenco y lo dejamos 30 minutos en la nevera mientras vamos preparando el resto de ingredientes.
3. A continuación, cortamos en brunoise muy fina la cebolla morada o las chalotas. Es cierto que podemos integrarlo directamente en el cuenco del salmón para que vaya soltando su sabor, pero en esta ocasión hemos preferido hacer una capa de cebolla para que tenga más colorido. En cuanto la tengamos cortada, reservamos.
4. Por último, pasamos a cortar el aguacate. Para ello, lo cortamos por la mitad, extraemos el hueso con cuidado, quitamos la piel y lo cortamos en cubos o dados medianos. Le echamos un poquito de aceite, sal y un chorrito del medio limón que nos queda. Mezclamos con cuidado de no chafar demasiado el aguacate y reservamos en la nevera.
5. Ya podemos emplatar nuestro tartar de salmón ligero. Lo más sencillo para emplatar esta receta es utilizar un aro de emplatado en el caso de no tener podemos hacerlo a mano, pero esto requiere algo más de delicadeza. Colocamos el aro en el medio del plato donde lo vayamos a servir y echamos una capa de la mezcla del aguacate. Aplastamos o asentamos un poquito con el dorso de una cuchara sopera. Seguidamente, ponemos un poco de la cebolla previamente picada, volvemos a chafar un poquito. Tras esto, procedemos a poner la última y la capa más importante de la receta, el salmón. En el caso de este ingrediente sed algo más generosos con la cantidad de cada plato.

¡Listo! ¿Veis qué fácil? Podemos terminar nuestro tartar de salmón con unas hojas verdes por encima, o bien un poquito de cebollino picado, eso irá a gusto del consumidor. 🙂 ¡A disfrutar!

Es cierto que ahora tenemos una infinidad de posibilidades de a la hora de emplatar esta deliciosa refrescante receta una de ellas es como os hemos explicado arriba, pero podríamos hacer una especie de guacamole y posteriormente servir el salmón por encima. También, podemos cortar el aguacate en tiras muy finas e intentar hacer un círculo desplazando un poquito las tiras del aguacate, dándole forma con la mano hasta formar un círculo, en el medio pondríamos la mezcla del salmón. ¡Ya sabéis que podéis ser súper originales a la hora de emplatar este rico tartar de salmón! ¡Dadle rienda suelta a vuestra creatividad y a vuestras manos, y no dejaréis de sorprender!