Empanadillas de mejillones
Ingredientes:
Una buena idea para hoy es aprovechar nuestros deliciosos mejillones en escabeche para el relleno de unas sabrosísimas empanadillas de mejillones. ¿Qué tal os suena?
De esta manera vais a poder servir un riquísimo aperitivo, o también un entrante como primer plato. Incluso para llevar al día siguiente al campo y organizar un picnic, pues siguen igual de buenas, o más, de un día para otro. Además, ayudaremos a cuidar nuestra salud y la línea, dadas las excelentes propiedades que tienen los moluscos en general y los mejillones en particular (lo podéis ver en nuestra receta de mejillones en salsa, que os animo a probar ya que están de chuparse los dedos).
Cómo hacer empanadillas de mejillones:
- Comenzamos preparando la masa. Ponemos a hervir un cazo al fuego con el agua, un chorreón de aceite y una cucharadilla de sal. Cuando empiece a cocer (con burbujas) retiramos del fuego.
- Ponemos la harina en un bol amplio y volcamos el agua, mezclando (con una cuchara, por favor, que si no nos quemamos) hasta hacer una masa.
- Incorporamos el huevo crudo entero y seguimos batiendo, hasta dejar de nuevo una masa uniforme.
- Colocamos la masa sobre la encimera, espolvoreamos con harina y amasamos a mano, hasta obtener la masa final, uniforme bien lisa. Lo dejamos en forma de bola, tapamos con un paño seco y dejamos reposar, de 15 a 20 minutos.
- Ya tenemos la masa preparada. Ponemos los huevos a cocer, con agua fría, un puñado de sal y ponemos a fuego fuerte hasta que empiecen a hervir, en cuyo momento bajamos a fuego medio. En total estarán 10 minutos hirviendo. A continuación, los pasamos por agua del grifo, fría, para cortar la cocción.
- Una vez fríos los pelamos y los troceamos en cuadraditos, haciendo lo propio con los mejillones que teníamos reservados. Los mezclamos bien, con lo que ya tenemos preparado nuestro relleno.
- Ahora cortamos la masa en porciones, no muy grandes, las vamos colocando sobre un papel de horno, las aplastamos con la mano y extendemos con un rodillo, hasta alcanzar el tamaño deseado. Procedemos a rellenar con la masa que teníamos preparada, las cerramos haciendo como un envoltorio y sellamos los bordes con la ayuda de un tenedor.
- Batimos el otro huevo en un bol junto con parte del caldo sobrante de los mejillones (basta un par de cucharadas) y procedemos a pintar las empanadillas con esta mezcla, usando un pincel de cocina.
- Precalentamos el horno a 190º. Una vez caliente introducimos las empanadillas en una fuente o la propia bandeja del horno, y dejamos hornear unos 10 minutos, vigilando que estén doradas, pero sin que puedan quemarse.
También, podéis utilizar este mismo relleno para hacer una exquisita empanada de mejillones.
Sugerimos acompañar de una ensalada de frutas a la parrilla, y como mejor bebida para complementar estas empanadillas de mejillones, un buen Rueda blanco joven.
El truco:
- El huevo duro lo incluimos con objeto de compactar la masa, si no quedaría demasiado líquida. En su lugar también podríamos sustituirlo por una patata cocida, obteniendo el mismo resultado.
- Nos ahorraremos el proceso de elaboración de la masa si compramos obleas ya preparadas.
- Si no teníamos cocinados los mejillones en escabeche, siempre podemos emplear un par de latas de mejillones en conserva.
- También podríamos freírlas en vez de hornearlas. En este caso las depositaremos en un papel absorbente según las vayamos sacando de la sartén, a fin de escurrir el aceite sobrante.
Alérgenos:
La harina para preparar la masa deberá ser sin gluten para los celíacos. Podemos omitir el huevo para los intolerantes, sustituyendo por patata cocida. Los alérgicos a los moluscos deberán abstenerse.
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