Las emociones, esos hilos que forman el tejido de la experiencia, han sido durante siglos una fuente inagotable de inspiración en infinidad de territorios. En esta ocasión, dos visionarios artesanos, el renombrado artista Okuda San Miguel y el prestigioso enólogo Raúl Pérez, se han unido para capturar la esencia misma de las emociones en su creación conjunta: un vino único llamado Kolor.

De esta forma, Kolor no es sino un vino tinto elaborado con uvas provenientes de viñedos de más de 50 años, en suelos de arcilla del pueblo de Valtuille de Abajo. Su añada 2020 es reconocida con 93 puntos Parker. Además, ha sido cuidadosamente elaborada a partir de racimos enteros de uva mencía, fermentada en grandes tinas de roble para luego pasar por una maceración de dos a cinco meses.

Posteriormente, este vino ha sido criado durante 12 meses en barricas de roble y cemento, sin clarificación ni filtración. De esta forma se permite que el vino conserve su autenticidad y pureza.

Calificado con 93 puntos Parker, se trata de un vino creado para emocionar y fruto de la fusión de dos genios en sus disciplinas: el artista Okuda San Miguel y el enólogo Raúl Pérez.

Se vive a través de los cinco sentidos

En nariz, Kolor se despliega con una sinfonía de notas violetas y aromas frescos con matices minerales cautivadores. La experiencia olfativa se enriquece con recuerdos a capuccino, evocando sensaciones que transportan al paladar a un viaje inolvidable.

En boca, la redondez característica de los suelos arcillosos se combina con una acidez perfectamente integrada y una estructura equilibrada. Así, confiere a este vino una exuberancia que no deja indiferente y que se combina con la frescura de la fruta. Un vino con una personalidad rompedora y versátil, que en su segunda añada ofrece una cata más fresca y elegante.  

Por su parte, el packaging de Kolor también refleja el universo del artista santanderino. Cada botella cuenta con una etiqueta llena de color diseñada por Okuda San Miguel  y que encapsula la esencia tanto de sus creadores como del propio vino. Este recipiente rinde homenaje a la creatividad y la identidad, permitiendo que Kolor trascienda el mundo del vino para convertirse en una obra de arte completa.

Parece que Kolor es mucho más que un vino. Es una experiencia que nace del trabajo conjunto de Raúl Pérez y Okuda San Miguel con un objetivo muy claro: emocionar. Una colaboración inesperada que comienza con un encuentro donde comparten sus ideas, reflexiones, conceptos e inquietudes sobre la vida. Además de poner en común sus diferentes disciplinas profesionales que da como resultado Kolor, una obra que se vive a través de los cinco sentidos.