En el momento en el que la familia Moreno atravesó por primera vez las puertas de la quesería Formaje y se adentró en el apasionante mundo del queso de la mano de Clara Diez, el alma del proyecto, tuvo muy clara la idea de perfeccionar su propuesta de lácteos para ofrecer a sus clientes unos quesos excelentes elaborados por pequeños productores de forma tradicional: sin prisas, con cariño y con amor por el producto. 

Así, posicionando el queso como un objeto de culto gastronómico, Mallorca, la empresa familiar con más de 90 años de trayectoria, se alía con Formaje e incorpora a su catálogo once referencias producidas en queserías donde todos los procesos son manuales y donde entienden que la excelencia está en respetar el valor añadido que aporta la manualidad.

Mallorca se alía con la quesería artesana Formaje para actualizar su repertorio de quesos.

Quesos internacionales

Entre la selección de quesos internacionales que se incorporan así a la propuesta, destacan el Brabander (Veenhuizen, Holanda), un gouda tradicional elaborado con leche de cabra que cuenta con un sabor que recuerda a dulce de leche y una consistencia mantecosa que hace que se deshaga en la boca con facilidad. 

Otro de los productos estrella es el queso Blossom Hornkäse BIO (Allgäu, Alemania), una versión del queso tradicional de la región aromatizado con caléndula, pétalos de rosa y lavanda que está cubierto con flores recogidas de las inmediaciones de la quesería en la que se elabora.

A su vez, destaca el queso Stilton de Colston Basset (Nottingham, Inglaterra), un queso azul con aromas terrosos y húmedos con el que Mallorca ya había trabajado en el pasado y que en boca es dulce con una ligera acidez. Por último, el Comté Marcel Petite (Saint-Antoine, Francia), uno de los emblemas de la quesería francesa, afinado en un fuerte subterráneo durante 15 meses.

Quesos blandos 

Además, Mallorca propone un surtido de quesos blandos, como el Reblochon d’Alpage (Thônes, Francia), un queso de notas amaderadas con una cremosidad inigualable; el Munster (Beblenheim, Francia), un queso intenso con un aroma muy característico, elaborado por Maison Fischer, una de las queserías más reconocidas de Alsacia; el queso Brie de Meaux (Triconville, Francia), que se moldea a mano siguiendo la receta más tradicional.

A la lista se añade el Brie trufado (Triconville, Francia), también elaborado en la quesería Dongé, reservado única y exclusivamente para los días navideños siguiendo la tradición; y, por último, el Camembert de Normandie (Champsecret, Francia), que remarca las notas fúngicas y vegetales propias de esta receta.

Además, a la lista de quesos nacionales de Mallorca se suman el queso Manchego D.O.P curado (Cinco Casas, Ciudad Real), uno de los quesos con más historia y nombre del panorama quesero español: un queso artesano suave, de sabores tostados, con un punto de acidez muy elegante y con una textura que tiende a cremosa incluso cuando el queso tiene una maduración alta; y el queso Valdivieso trufado, inspirado en la clásica receta del Moliterno al tartufo italiano que elaboran con trufa negra de Soria.

Un estilo de vida

En palabras de Carlos Arévalo, director de Tiendas de Mallorca: “Cada pieza de queso escogida es el reflejo de un descubrimiento, de un viaje hasta las aldeas más remotas y las fincas más apartadas donde pequeños productores llevan generaciones perfeccionando recetas y siguiendo las técnicas tradicionales”. 

“En Mallorca siempre hemos apostado por el respeto absoluto de la materia prima y por los procesos artesanales, por eso, esta alianza con Formaje, que comparte y fomenta el mismo estilo de vida, nos hace tanta ilusión”.

Por su parte, Clara Diez, fundadora de Formaje: “Compartir unos valores y una filosofía afines con Mallorca ha hecho que este trabajo conjunto haya sido muy natural y orgánico. La colaboración entre Mallorca y Formaje es el reflejo de un compromiso mutuo con el producto y sus orígenes, a lo que queremos rendir homenaje y dar visibilidad”.

Nuevos códigos y formatos

El nuevo surtido de quesos de Mallorca ya está disponible en sus tiendas físicas en Madrid y en su tienda online, donde el queso se presenta en diferentes formatos: por unidad, en cuña, troceado o en las icónicas tablas de queso de madera de Mallorca.

Si hay algo que define a Mallorca es la búsqueda constante de nuevos códigos y formatos, manteniendo la esencia de sus inicios y el cuidado de los detalles. Por eso, en esta ocasión, la empresa familiar apuesta por una marca como Formaje para ampliar su propuesta de quesos con el objetivo de convertir el consumo de estos lácteos artesanos en una experiencia gastronómica de altura y de poner en valor los quesos artesanos y el buen hacer de las queserías y de los productores locales.