Tacos de pollo

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Ingredientes:

El origen de los tacos es muy antiguo. Las tortillas provienen de la América Precolombina, incluso el modo de comerlas en tacos data de ese mismo periodo. Se dice que Moctezuma usaba la tortilla a modo de “cuchara” para sostener los alimentos.

Se molía el maíz hasta hacerlo harina. Después se mezclaba con agua y se cocinaban sobre piedras calientes, decorándose con cochinilla, frijol y chile. Parece que antiguamente los llamaban “tlahco” que en lengua Náhuatl significa “en el medio”, ya que se usa como recipiente para poner la comida en el medio.

Hay infinidad de tacos diferentes, según la preparación, el relleno o la carne que se utilice. Igual no lo sabíais, pero los burritos, fajitas y demás también son tipos de tacos.

Nosotros vamos a preparar una versión de los famosos tacos al pastor. Estos se crearon en Ciudad de México en los años ́70 y siguen siendo uno de los tacos estrella de los mexicanos.

Si os está gustando esta receta no podéis dejar de probar nuestra versión de burritos de ternera. ¡Te chuparás los dedos!

Cómo hacer tacos de pollo:

Normalmente, los tacos al pastor se hacen con carne de cerdo y piña, pero nosotros vamos a hacer nuestra versión con pollo.

Estos son unos tacos muy frescos, con sabores cítricos, por lo que en esta receta hemos decidido utilizar tacos crujientes, ya que queda a la perfección con el resto de ingredientes. Pero si lo preferís, podéis usar tortillas tradicionales. Si os decantáis por esa opción, lo ideal es que fueran de maíz y de tamaño pequeño.

1. Primero troceamos el pollo en taquitos fáciles de comer y los adobamos. Para ello podemos usar un poquito de zumo de limón, con pimentón dulce o picante, pimienta, y si nos atrevemos, un poquito de pimienta de cayena, para darle un toque picante.
2. Dejamos que el pollo absorba los sabores mientras preparamos el resto de los ingredientes.
3. Después vamos a cortar el tomate en daditos pequeños y reservamos. Hacemos lo mismo con la cebolla, la cortamos en trocitos pequeños y reservamos.
4. Luego cortamos la piña y reservamos también. La piña puede ser fresca si es temporada, o sino podemos usar también una lata de piña en su jugo.
5. Por último, cortamos un poquito las hojas de cilantro, que nos servirá para darle un toque fresco a nuestros tacos. Pero si queremos potenciar el sabor del cilantro, le añadiremos parte del tallo.
6. En una sartén echamos una cucharada sopera de aceite de oliva virgen extra y hacemos el pollo a la plancha hasta que los trozos estén bien dorados.
7. Ahora solo nos queda montar nuestro taco. Cogemos nuestro taco crujiente y le metemos un poco de pollo, un poco de tomate, unos trozos de piña y cebolla, mezclando todos los ingredientes.
8. Y por último le añadimos un poco de cilantro (no mucho, ya que tiene un sabor muy fuerte), y regamos con un poco de zumo de lima.

Y ya estarían nuestros tacos listos 🙂 Como veis, es una receta original y muy fácil de preparar, con sabores muy veraniegos. Podéis servir con nachos y guacamole, al más puro estilo mexicano.