La UE reabrirá el debate sobre las advertencias sanitarias en etiquetas de vino

La UE reabrirá el debate sobre las advertencias sanitarias en etiquetas de vino

Publicado el lunes 04 de julio del 2022 | 06:00
lunes 04 de julio del 2022 | 06:00

El Parlamento Europeo planea volver a la carga con el debate sobre la inclusión de advertencias sanitarias en el etiquetado de bebidas alcohólicas como el vino y la cerveza. En febrero de este año se descartó la propuesta en una resolución no vinculante tras aceptarse las enmiendas promovidas por el Partido Popular para suavizar las recomendaciones en materia de consumo de alcohol recogidas en un informe sobre la estrategia de la UE contra el cáncer. 

En un encuentro con representantes de las principales Denominaciones de Origen de vino españolas, la portavoz del PP en el Parlamento Europeo Dolors Montserrat avanzó que la cuestión podría reabrirse ante la presión de un grupo de expertos parlamentarios de algunos países del norte de Europa. En concreto, preocupa el alcance de la conocida como declaración de Oslo, un documento pactado el pasado 17 de junio entre diferentes asociaciones contra el alcohol y que no diferencia el consumo de vino ligado a la dieta mediterránea de la ingesta abusiva.

A través de lo que se conoce como un acto delegado que deberá posteriormente ser aprobado tanto por las capitales europeas como por la Eurocámara, parlamentarios de países como Irlanda y Noruega instan a que «la normativa de la UE refleje el apoyo público a la obligatoriedad de las etiquetas de advertencia en los productos alcohólicos, a que los gobiernos nacionales y la UE se aseguren de que los procesos de elaboración de las políticas sanitarias estén protegidos de la interferencia de la industrial del alcohol», además de gravar aún más los productos con alcohol.

La nueva propuesta será redactada a finales de este año

Se espera que la nueva propuesta para establecer que el vino es un alimento cancerígeno sea redactada a finales de este año. De salir adelante, peligraría la subvención de 1.000 millones de euros que recibe actualmente el sector vinícuola europeo, de cuales 227 millones van destinados a España. Actualmente, la UE exporta el equivalente a 14.000 millones de euros anuales a países terceros, lo que convierte al vino en el producto agroalimentario más comercializado en el exterior.

Frente a esta medida, Montserrat defiende la autoregulación de sector y una ingesta responsable. «El consumo moderado de vino, cava o cerveza forma parte de nuestro modo de vida y de nuestra saludable dieta mediterránea y no se puede criminalizar”. Para José Luis Benitez, Director General de la Federación Española del Vino, es necesario diferenciar la ingesta moderada presente en los países del sur de Europa de los problemas de alcoholismo que sufren los países del norte de Europa y que han llevado a legislaciones muy restrictivas como la promulgada en Irlanda.

Los partidarios de esta iniciativa se basan en un estudio realizado en 2018 por The Lancet, que incluía el alcohol como un «factor de riesgo» para la salud en general, y en la contracción del cáncer en particular. Hasta el punto de consiiderar su consumo como el principal motivo de muerte prematura y discapacidad para las personas entre los 15 y los 49 años, además de suponer la décima parte de todas las muertes en este grupo de edad. Conclusiones que han sido criticadas por la propia comunidad científica debido a sus fallos de metodología y análisis, aunque reconocen que los riesgos de desarrollar enfermedades superan a los posibles beneficios del consumo.

Noticias Relacionadas