Cafestore supera los 37 M en restauración tras revisar y ampliar contratos
El efecto túnel de la recuperación persiste en Cafestore. Pese a superar los volúmenes de negocio prepandemia, al segundo operador nacional en el ámbito de la restauración en ruta no termina de reincorporarse a la senda de la rentabilidad. Cerró 2023 con unos ingresos de 54,3 millones de euros, un 19% por encima de la cifra del año anterior, pero este crecimiento no evitó que registrara un saldo negativo de 1,4 millones de euros.
Con más de 50 puntos de venta en 11 comunidades autónomas y más de 5 millones de clientes cada año, Cafestore acentúa su foco en el mercado del viajero. Los ejes de trabajo en los que se ha centrado últimamente son la apertura de nuevos centros, negociación con proveedores y optimización de compras, nuevas políticas de precios y revisión de contratos.
Junto a la buena marcha del negocio, el crecimiento experimentado durante el año pasado es consecuencia del mercado de restauración, cuyas ventas aumentaron hasta lo 37,3 millones de euros, frente a los 30 millones de 2022. También cabe destacar la apertura de los nuevos centros, ya que, entre otros hitos, se estrenó como un nuevo operador de servicios aeroportuarios, con seis locales en el Aeropuerto de Madrid-Barajas (Terminales T4, T4S y T2), en la que opera marcas como Arzábal, Madrí, Tony Romas y Beher.
En 2023 se estrenó como operador aeroportuario
Durante el 2023 se hizo con la gestión y explotación del servicio de hostelería y restauración en el área de servicio de Compostela de la autopista del Atlántico AP-9 y de Las Atalayas M 50 Villaviciosa de Odón (Madrid). Asimismo, amplió el contrato de arrendamiento de edificaciones de restauración hostelera y áreas de servicio de Cirpián de Viras (Orense).
Durante varios ejercicios, la sociedad ha estado incursa “en causa de disolución”, situación que ha logrado sortear gracias al apoyo de Sacyr. Al cierre del año pasado presentaba un fondo de maniobra negativo de 4,9 millones de euros, pero cuenta con el sostén financiero de su matriz, con la que mantiene un préstamo de 3,7 millones. En el caso de resultar insuficiente, el grupo ha manifestado expresamente que prestará los recursos necesarios para posibilitar el cumplimiento de los compromisos y de las obligaciones de pago y asegurar la continuidad de las operaciones de Cafestore.
Con todo, la cartera de Cafestore alcanzó los 364 millones de euros al cierre del ejercicio, lo que garantiza la actividad para los próximos ejercicios. Como principal riesgo de actividad, la sociedad destaca la exposición a un riesgo de crédito que, aunque mínimo, es debido a que se nutre de los ingresos instantáneos de los usuarios de sus centros durante la prestación del servicio. El resto de ingresos que poseen como consecuencia de la prestación de servicios a terceros son con las Administraciones Públicas estatales (Congreso de los Diputados, Asamblea de Madrid, lsfas- Ministerio de Defensa, Generalitat Valenciana) y empresas petroleras de buen rating como Repsol.