Andrés Sánchez Magro

Dentro de las 31 nuevas Estrellas Michelin, ha vuelto a cobrar protagonismo el territorio jienense. En esa localidad andaluza se está creando una verdadera pasarela de restaurantes con tremenda personalidad gracias a una cultura de proximidad y al trabajo con el aceite de oliva virgen extra. De hecho, el restaurante Bagá del cocinero Pedro Sánchez, no confundir con el político, es uno de los destinos para todos los gourmets de aquí y de fuera gracias a su minimalismo expresivo y a su limpieza
imaginativa. Estrellado como él se encuentra Dama Juana, donde se recrea intensamente lo tradicional de la mano de Juan Aceituno. Al universo de los macarrones se han subido en esta edición el estupendo Malak, y la sorpresa de Radis.

Juanjo Mesa es su cocinero. Con tan sólo 27 primaveras, este sujeto cargado de bonhomía, ha abierto una recoleta casa que sin petulancia define como propia de la cocina casera. Formado en restaurantes donde el mismo ha decidido que debía aprender, caso del bilbaíno Nerua, Mugaritz, o de la mano del propio Pedro de Bagá, ha esperado su momento para que su cocina fluida y de mucha raíz tenga su propia voz.

Ha esperado su momento para que su cocina fluida y de mucha raíz tenga su propia voz

Recientemente ha obtenido el galardón del mejor postre elaborado con AOVE en la última edición del San Sebastián Gastronomika. Gracias al plato de pan, el aceite y el chocolate con el que ha sido reconocido la perseverancia de este cocinero. Con este postre que le recuerda a las meriendas de su infancia, Juanjo demuestra que no hay nada mejor que la sencillez a la hora de hacer un buen plato y trasportar a donde uno fue feliz.

Juanjo abría su apuesta más personal el 1 de diciembre del 2020 hace exactamente dos años. En ella expone su pasión hacia los fogones que le trasmitieron sus padres, hosteleros de toda la vida, que regentaban un pequeño restaurante familiar con una cocina honesta en un pueblo entre Jaén y Madrid.

En Radis ofrecen menú degustación que cambia cada día con la oferta del mercado; sin embargo hay 4 platos en la carta que llevan con ellos desde los inicios que son el ajoblanco, las habas, el tomate y el cocido, y que de momento seguirán conservando. Juanjo cuenta que tiene una parte de Bagá, es un espacio pequeñito y la cocina a la vista, pocos afortunados comensales pero más exclusivos.

Como reza el dicho “A quien Dios quiso bien, casa le dio en Jaén”. ¡Viva tú, Juanjo Mesa!.