La fortaleza de la demanda turística embalsada durante el covid resiste a la inflación e impulsa la actividad de Meliá Hotels International. La compañía ha cerrado los nueve primeros meses del año con unos ingresos de 1.273 millones, un 114% más que en el mismo periodo de 2021 y apenas un 8% por debajo de 2019, y un beneficio neto de 52,6 millones, frente a las pérdidas de 166,3 millones del mismo periodo del año pasado.

«Complace ver que el tercer trimestre confirma la ansiada recuperación iniciada ya en el trimestre anterior. La fortaleza de nuestro canal directo, junto con una recuperación notable de las OTA’s, touroperadores y cliente internacional ha sido clave para una temporada estival que ha mejorado el RevPar en prácticamente todas las áreas respecto a niveles del 2019», apuntan la hotelera en un comunicado remitido a la CNMV.

Si bien el grupo ya venía de cerrar en positivo la primera mitad del año, las ventas correspondientes al tercer trimestre alcanzaron los 532 millones de euros. Esto es, un 3% más que 2019, año de referencia para todo el sector.

Los resultados se atribuyen a una ocupación positiva y, sobre todo, a una importante mejora de los precios medios

Meliá se beneficía así de su liderazgo vacacional (segmento que experimentó una recuperación “en UVE»), con una positiva evolución observada en todos los destinos vacacionales españoles y en las principales ciudades turísticas o “bleisure» como Palma, Barcelona o Valencia. Los resultados son atribuibles a una positiva ocupación – todavía ligeramente por debajo de 2019- pero sobre todo, a una mejora muy importante de los precios medios, que registraron un incremento medio de dos dígitos. Más notorio en los hoteles de lujo, pero con un aumento del 22% en el segmento vacacional.

El ingreso medio por habitación disponible (RevPAR) del tercer trimestre aumentó un 68,1%, hasta los 89,8 euros. Entre enero y septiembre esta cifra fue de 70,3 euros (+96,1% interanual). Esta evolución de los precios obedece a la combinación de una fuerte demanda, sumada a la optimización de ingresos facilitada por los canales digitales, y a la política de renovación y mejora de los hoteles llevada a cabo por la compañía, con un foco importante en el segmento superior y de lujo.

En palabras de su consejero delegado, Gabriel Escarrer, «Meliá se ha beneficiado de ventajas estratégicas que le han permitido acelerar el avance de la recuperación, como su fuerte posicionamiento en el segmento vacacional, y la optimización de los ingresos gracias a su liderazgo en distribución digital».

Los gastos de explotación tuvieron un incremento del 76,7% respecto al mismo periodo del año anterior y un ahorro del -6,4% en comparación con 2019. De cara a la recta final del año, la compañía espera la recuperación del segmento MICE y Corporate en las grandes ciudades. Según ha destacado anteriormente, la actividad del Palacio de Congresos de Palma –de la que se benefician directamente– recuperará el volumen de eventos de 2019 en el último trimestre de este año.

«Nuestra misión de cara al cuarto trimestre es consolidar la recuperación y apuntalar todas las tendencias y resultados positivos de este tercer trimestre. El empuje de aquellas palancas que aún presentan potencial como son los segmentos MICE y Corporate en las grandes ciudades serán clave. Nuestras perspectivas son por tanto positivas, sin detectar hasta el momento impactos derivados del temor a una recesión», indican en el comunicado.