Canelones de espinacas

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Ingredientes:

Nos ponemos manos a la obra con una receta que os sorprenderá tanto que posiblemente la repitáis en varias ocasiones. Hoy, os vamos a enseñar a hacer unos canelones de espinacas.

Una receta que muchos creen imposible, pero eso se debe a que les resulta más fácil pedirlo en algún restaurante / deliveroo, a mamá/ papá, o a la abuela. Pues no, ya ha llegado el momento de que vosotros mismos sorprendáis a esas personitas de vuestra familia que os cuidan tanto, y qué mejor que con un buen plato de comida casero.

Hay que tener en cuenta que para que los canelones queden perfectos han de cubrirse de manera generosa con salsa de tomate, preferiblemente casera, ya que le podemos dar el toque que queramos, como, por ejemplo, con unas hojas de albahaca. Cosa que os aconsejo encarecidamente.

El queso rallado que utilicéis puede ser mozzarela, cheddar, gruyere, queso suizo… o el que más os guste.

Cómo hacer canelones de espinacas:

Antes de nada, lo primero que vamos a cocinar es la salsa de tomate frito casera, para ello podéis echar un vistazo a nuestra deliciosa receta, y endulzarla con azúcar, algún endulzante natural, o bien emplear calabaza. De esta forma evitamos agregar ningún tipo de azúcares. Vamos con el resto de la receta.

1. Cogemos una sartén o cacerola, y calentamos. Una vez caliente echamos las espinacas frescas, junto a un mini chorrito de agua. Bajamos a fuego medio, y tapamos. Vigilamos para que no se peguen.
2. Aprovechamos los 2 / 3 minutos de cocción de las espinacas para cortar en brunoise el diente de ajo. No os olvidéis de retirarle la raíz.
3. Una vez tengamos listas las espinacas, las sacamos, y las escurrimos bien hasta que suelten la mayor cantidad de agua. Esperamos a que se atemperen o enfríen.
4. A continuación, cogemos un cuenco y echamos las espinacas cocidas, la ricotta, el parmesano rallado, los 115 g de queso rallado, el huevo, el diente de ajo picado, la nuez moscada, la pimienta y la sal. Mezclamos todos los ingredientes hasta que estén bien combinados.
5. Ahora, pasamos a montar y hornear estos riquísimos canelones de espinacas, para ello cogemos un molde apto para horno donde quepan todos los canelones previstos. En el caso de no tener, podemos hacerlo en dos fuentes. Precalentamos el horno a 180ºC.
6. Vamos con la parte más peliaguda. Debemos poner la mezcla de la ricotta y las espinacas en una manga pastelera con boquilla grande, sino tenéis, podéis utilizar una bolsa de cocina, y cortar con un cuchillo o tijeras una esquina de dicha bolsa.
7. Primero, pasamos a rellenar los tubos de pasta con la mezcla anterior.
8. Posteriormente, ponemos una pequeña cantidad de tomate frito casero por la base de toda la fuente. Colocamos los canelones rellenos de espinacas y ricotta, y echamos por encima el resto de salsa de tomate cubriendo bien los tubos. Tapamos la fuente con papel albal o de aluminio, y metemos en el horno durante unos 25 minutos.
9. Pasado el tiempo, quitamos el papel de aluminio, cubrimos con el queso rallado sobrante, y lo volvemos a meter en el horno unos 10 minutos, o hasta que se haya tostado.

Podemos servir nuestros ricos canelones de espinacas con unas hojitas de albahaca. Mmm, para chuparse los dedos. En este caso no hemos agregado bechamel a la receta, pero sentiros libres de echarle un poquito de bechamel casera por encima para darles mayor cremosidad.

En el caso de haber escogido o comprado láminas de lasaña en vez de tubos para canelones, debemos cocer las láminas según indique el paquete, una vez blandas pasarlas a un bol con agua fría y hielos, poner el relleno con la manga pastelera y cerrarlos. Ha de quedar el cierre siempre boca abajo.

Para conservarlos cocinados duran unos 3 días en nevera, sino podemos congelarlos, hechos, o bien en crudo, y hornearlos cuando los vayamos a consumir. También podemos congelar la mezcla directamente.