
Manosanta alcanza los cuatro locales y roza los 2 millones de churros vendidos
Mejor que mantener las tradiciones es renovarlas. Incluso cuando se trata de una costumbre tan castiza como los churros, que viven su particular revolución gracias a Manosanta. A su manera, le ha dado una vuelta al concepto para atraer a un público de todas las edades. A manos de la familia Aragón, el proyecto arrancó en 2021 con un local en la madrileña calle de Hermosilla y ya van por los cuatro locales en la capital.
La presencia de Manosanta abarca los barrios Salamanca, Malasaña, Barrio del Pilar y Carabanchel. Combinando la esencia de la churrería tradicional con una visión moderna y cosmopolita, la marca logró vender más de un millón de churros y 600.000 porras en 2024. El delivery acapara la mitad de estas ventas, con más de 1.700 unidades cada día a través de servicios como Glovo o Uber Eats.
De la carta de Manosanta destacan sus Churros, Porras y Pecaditos (cubos de churros en versión mini). Todos ellos se pueden pedir con azúcar, canela, ambas opciones combinadas o para degustar solos y, a su vez, acompañarlos de sus dips de dulce de leche, leche condensada o crema de cacao. Además, en esta churrería ofrecen 3 tipos de raciones: Café con churros o porras (a elegir entre 5 churros o 3 porras); Chocolate con churros o porras (a elegir entre 5 churros o 3 porras) y el Chocolate con Pecaditos (churritos en versión mini), un plan perfecto para disfrutar con amigos o en pareja.
Por su parte, el chocolate también cobra especial protagonismo encontrando en su carta distintas opciones como el Chocolate Manosanta, el clásico de toda la vida, que se puede pedir en taza, medio litro o un litro entero, para los que prefieran compartir.