Vicio sigue haciéndose notar. La compañía acaba de inaugurar una nueva ‘flagship’ con capacidad para más de 100 comensales en pleno centro Barcelona. El local, situado en la calle Comte d’Urgell 204 de la ciudad, cuenta con más de 500 m2 y da trabajo a más de 43 personas. 

Aunque la compañía ya contaba con un local híbrido en la Vía Augusta de Barcelona, en cuyo interior hay un sitio reservado para comer, el restaurante de Urgell es un concepto completamente nuevo. En este sentido, la decisión estratégica de abrir restaurantes físicos responde directamente a la creciente demanda de la comunidad Vicio, que quería una experiencia que fuese mucho más allá del delivery.

En palabras de Aleix Puig, cofundador y presidente de Vicio, “Barcelona es y será nuestro hogar por eso estamos tan contentos de poder abrir este restaurante. Sabemos que Barcelona quiere a Vicio y Vicio quiere a Barcelona por eso ahora ponemos a su disposición el espacio de referencia de la burger de nuestra ciudad”.

El nuevo local, cuyo diseño lleva la firma de MOINDE y la obra ha sido realizada por External Reference, estudio encargado del primer restaurante de Madrid y del diseño de sus oficinas, está inspirado en las corrientes vanguardistas y modernas. Asimismo el espacio fusiona los colores corporativos, que tejen la identidad distintiva del nuevo espacio.

Materiales como el acero y el aluminio añaden textura industrial y un toque futurista, redefiniendo los estándares tradicionales del diseño. En sintonía con la teoría del diseño moderno, los grandes cristales emulan los escaparates de una galería de arte contemporáneo a la vez que desdibujan las fronteras entre el interior y el exterior, convirtiéndose en elementos artísticos e invitando a los comensales a sumergirse en una experiencia visual única.

Tras consolidarse en el sector del delivery con 23 locales repartidos entre Madrid, Barcelona, Sevilla, Málaga, Valencia y Palma de Mallorca, la compañía de restauración prevé abrir más de 15 nuevos establecimientos dine-in en los próximos 12 meses. Con estas aperturas, la compañía busca consolidar sus principales mercados –Madrid y Barcelona– así como potenciar su presencia en nuevas ciudades.

«Aunque hemos logrado mucho hasta ahora, todavía queda mucho por hacer. No hay límites, el objetivo no es ni más ni menos que darle lo suyo al mundo entero y este es nuestro foco máximo para los próximos meses», añade Aleix Puig